Xi Jinping: "China está dispuesta a ser "socio y amigo" de EE.UU."
Los entretelones entre los presidentes de Estados Unidos y China, mostraron un gran acercamiento, en medio de un recinto con muchos empresarios de gran reconocimiento a nivel mundial.
Por redacción
Luego de un encuentro esperado entre los mandatarios de Estados Unidos y China, el presidente del país asiático sostuvo que su nación está "lista para ser un socio y amigo de Estados Unidos". Esto ocurrió en medio de empresarios estadounidenses en San Francisco, en un contexto de preocupación por la desaceleración de su economía.
En plena batalla comercial por quién resultará ser el principal oferente a nivel global , "esto sólo conducirá a medidas equivocadas, acciones desacertadas y resultados no deseados", dijo en una cena al margen de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que se celebra en California.
Los dichos de Xi en San Francisco se produjeron horas después de su esperada reunión con el presidente estadounidense Joe Biden, donde ambos acordaron reducir las tensiones, en su primera encuentro en un año.
En concreto, ambos anunciaron una serie de acuerdos, comenzando con la reactivación de una línea directa militar de alto nivel. Todo ello después de sostener conversaciones en el lujoso Jardín Filoli, la opulenta finca que fue escenario de la serie "Dinastía" en la década de 1980.
"Deberíamos construir más puentes y pavimentar más caminos para las interacciones entre personas", dijo Xi ante una audiencia de alrededor de 400 líderes empresariales, funcionarios gubernamentales y académicos. "No debemos crear obstáculos ni crear un efecto paralizador", añadió.
Entre los presentes se encontraban el director general de Apple, Tim Cook; Laurence Fink, de BlackRock; y el director general de Pfizer, Albert Bourla, según la lista a la que tuvo acceso la AFP.
Los comentarios de Xi en el evento organizado por el Consejo Empresarial Estados Unidos-China y el Comité Nacional de Relaciones Estados Unidos-China ocurren en medio de preocupaciones sobre una supervisión empresarial más estricta de China y las tensiones bilaterales.
La confianza de las empresas extranjeras en China alcanzó en septiembre su punto más bajo en años, según lobistas empresariales estadounidenses y europeos, en un momento en que las firmas estadounidenses buscan desviar sus inversiones.