Por qué los bonos ajustados por inflación siguen sin ser atractivos para el mercado
Los Bonos CER han sido uno de los instrumentos favoritos del mercado, pero en los últimos meses han perdido su atractivo.
Por Francisco Cotti
Durante las últimas semanas, el mercado de deuda en pesos en Argentina ha experimentado un fuerte aumento de la tensión, lo que ha provocado un desplazamiento al alza en los rendimientos de los bonos que ajustan por CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia), que son aquellos que se ajustan por inflación. Este movimiento refleja la cautela y el escepticismo del mercado sobre el futuro de la deuda.
En particular, se ha observado un notable desplazamiento de la curva de bonos CER en las últimas semanas, sobre todo en los tramos medios, que coinciden con los vencimientos posteriores a las elecciones, es decir, durante la próxima gestión. La semana pasada, la curva mostraba retornos reales de 4% en el tramo corto y de entre 8% a 10% en el tramo medio y largo. Sin embargo, a lo largo de la última semana, la curva de bonos CER se ha desplazado hacia arriba fuertemente. La parte corta sigue operando con tasas que arrancan en el 4% y luego saltan a niveles de 10% a 14% para los vencimientos del tramo medio y largo.
Actualmente, la inflación interanual es del 102,5%, y hay proyecciones económicas que la ubican cercana al 140% en los próximos 12 meses. La aceleración inflacionaria hace que el mercado les pida más rendimientos a los bonos.
Por otro lado, la falta de intención por parte de los fondos y los inversores de buscar posicionarse en vencimientos más largos también ha contribuido a este movimiento en la curva CER. A pesar de que las tasas que ofrecen los bonos CER son elevadas, los inversores se mantienen cautelosos debido a la incertidumbre y los riesgos asociados con la deuda en Argentina. Los ruidos sobre el reacomodamiento de la deuda en dólares del Gobierno tampoco han mejorado el panorama para la deuda y la tensión se mantiene.
Agregado a esto, el canje de deuda del gobierno también ha acentuado el desacople de la deuda en pesos respecto del mercado global. El resultado del canje fue decepcionante, ya que hubo poca participación del sector privado. Estos factores han logrado que los bonos en pesos sean vistos como un activo de mucho riesgo y los inversores optan por dolarizar sus carteras de cara aun año con mucha incertidumbre.