Por qué las acciones europeas alcanzarán un máximo en 2024 | Dolarhoy.com
Europa|01 de diciembre de 2023

Por qué las acciones europeas alcanzarán un máximo en 2024

Beata Manthey, de Citigroup, espera que el índice de referencia Stoxx 600 finalice 2024 en 510 puntos, lo que implica un aumento del 10% desde el nivel actual.

Por Gonzalo Andrés Castillo

 

Beata Manthey, una de las principales estrategas en Citigroup, explicó en una nota para sus clientes publicada esta semana por qué cree que las acciones europeas alcanzarán un nuevo máximo histórico durante el transcurso del 2024.

 

Concretamente, la especialista pronosticó que la renta variable tendrá un año de sólido crecimiento respaldado por una mejora en el "equilibrio de los riesgos macroeconómicos", ya que un modelo del banco ajustado por el impacto de las tasas de interés subidas por el Banco Central Europeo (BCE) sugiere que "Europa ya tiene las peores noticias en materia de precios".

 

En este contexto, Manthey espera que el índice de referencia Stoxx 600 finalice 2024 en 510 puntos, un objetivo compartido por Deutsche Bank, lo que implica un aumento del 10% desde el nivel actual, superando el récord de 495 puntos de principios de 2022.

 

La ejecutiva destacó que los inversores podrían estar siendo demasiado pesimistas sobre las perspectivas de ganancias corporativas en medio de una desaceleración económica, lo que creó un "colchón" para los precios de las acciones, ofreciendo cierta resistencia si se reducen las estimaciones de beneficios.

 

A pesar de que las acciones europeas estuvieron rezagadas en comparación con sus contrapartes estadounidenses, ya que en el año el S&P 500 subió un 19% y el Stoxx 600 "sólo" un 9%, Manthey se mantuvo optimista.

 

Mientras que en Estados Unidos los rumores sobre inteligencia artificial impulsaron a los gigantes tecnológicos, en Europa, empresas como Bank of America y Societe Generale prevén caídas debido a la desaceleración económica y los aumentos de tasas de interés.

 

No obstante, Citigroup dijo que la disminución de la inflación, la reducción de riesgos geopolíticos y una posible mejora en la actividad empresarial europea auguran bien para las acciones en la región.