Las acciones japonesas alcanzan su nivel más alto en 34 años
El salto refleja el optimismo de los inversores hacia las acciones japonesas que se mantiene luego de que crecieran alrededor de un 25% durante el 2023.
Por Gonzalo Andrés Castillo
El índice Topix de Japón, similar al Nikkei 225 pero más completo, subió un 2% este miércoles hasta superar los 2.450 puntos, un nivel no visto desde julio de 1990.
Este salto refleja el optimismo de los inversores hacia las acciones japonesas que se mantiene luego de que crecieran alrededor de un 25% durante el 2023, marcando el mejor rendimiento en una década.
De hecho, los índices estuvieron entre los que más ganaron en todo el mundo el año pasado, principalmente porque las autoridades presionaron a las corporaciones para que mejoraran el valor para sus accionistas, la deflación de décadas desapareció y el yen se debilitó, apoyando los beneficios de los exportadores.
Además, los antiguos inversores en China y Taiwán también pudieron haber estado recurriendo a Japón a medida que la geopolítica, las incertidumbres regulatorias y las preocupaciones sobre las perspectivas económicas de China continúan siendo el foco de atención.
"Siento que los fondos están huyendo a Japón", dijo Shingo Ide, estratega jefe de acciones en NLI Research Institute. "Una de las razones de esto puede ser la depreciación del yen, pero creo que puede ser que los fondos estén huyendo de China y Taiwán", agregó.
No obstante, de cara al futuro, el Topix podría no crecer tan explosivamente, aunque sí ofrecería atractivos retornos.
"Creemos que los mercados japoneses podrían seguir siendo atractivos por ahora, aunque los rendimientos pueden no ser tan fuertes como los de 2023", proyectó Charu Chanana, estratega de mercado en Saxo Capital Markets.
Entre los desafíos más importantes a los que se enfrenta la renta variable japonesa, se destaca el posible ajuste monetario del Banco de Japón y una potencial apreciación de la divisa local.
"El mercado está subiendo gracias sólo a los aspectos buenos de todo: menor inflación y tasas más bajas con economías aún resistentes y tipos de cambio estables. Pero quizás sea demasiado bueno para ser sostenible", comentó Naka Matsuzawa, de Nomura Holdings.