¿Invierto solo o mejor con un asesor?
Una vez que decidiste empezar a invertir surge la duda de que instrumentos comprar, cómo elegirlos. Y este es un camino que se puede transitar sólo o acompañado. ¿Qué formas hay de gestionar tus inversiones y cuál es la mejor?.
Los dos caminos que te pueden llevar a buen puerto
Dentro de las formas de manejar tus inversiones, hay dos maneras que en nuestra experiencia pueden funcionar bien y una que no.
Primero empecemos por los dos caminos que te pueden dar buen resultado.
El primero es que las decisiones de inversión las tome el inversor por su cuenta. Siempre habiéndose formado previamente, claro está. No vas a salir a invertir en lo que escuchaste en un video de YouTube o lo que te recomendó un amigo en un asado. Esa es la forma más segura de perder todo tu capital.
Si vas a elegir este camino, tené presente que tenés que dedicarle tiempo. Es como si hubieras empezado una nueva carrera, hay que formarse con responsabilidad y seguir el mercado permanentemente. Si solo vas a ver tu cartera cuando tengas tiempo o no conocés de instrumentos de inversión, este camino no es una alternativa para vos. Pero si realmente vas a poder dedicarte a eso y tener la disciplina de mantener estos esfuerzos en el tiempo, es un camino que podés considerar.
La segunda forma es que a las inversiones la gestione un asesor profesional. Acá se trata de elegir una persona idónea en finanzas en la que deposites tu confianza para administrar tus inversiones. Este profesional se ocupa de analizar tu perfil de inversión y gestionar tu cartera de acuerdo con tus objetivos.
Es importante aclarar que este profesional debe estar matriculado en Comisión Nacional de Valores, lo cual te otorga las protecciones del mercado de capitales al momento de invertir. En este camino, las decisiones de inversión las toma el asesor y rinde cuentas al inversor de los rendimientos. Esta forma de invertir es ideal para quienes quieran aprovechar las ventajas de invertir, pero no tengan tiempo para dedicarse a esa actividad o prefieran obtener un mejor rendimiento de sus inversiones dejándolo en manos de profesionales.
¿Cuál de estos dos caminos es el mejor? Esa es una decisión personal porque las dos pueden dar buenos resultados. Cada persona podrá decidir cuál prefiere de acuerdo con su perfil y estilo de vida.
Pero hay un tercer camino que muchos toman y es el que debés evitar porque conduce al fracaso.
Tener dos personas al volante te hace chocar
Ese camino que no funciona es cuando las decisiones de inversión las toman ambos, inversor y asesor. Es una forma intermedia que es como si en un auto tuvieras dos volantes y dos personas manejando. Sería muy fácil chocar, ¿verdad?
Bueno, lo mismo pasa al momento de invertir. Podrías pensar en que podés manejar tu cartera vos y que cuando tengas una duda llamar a tu asesor o que tu asesor te contacte cuando identifique una oportunidad nueva y que ahí lo analizan en conjunto. El tema es que esa forma de trabajar no funciona por varios motivos que te comento a continuación.
El primero es que vos te vas a comunicar con el asesor para que vea tu cartera cuando tengas tiempo para verla. Y ese no es necesariamente el momento en que tu cartera necesitaba atención. Si lo llamás cuando podés tu asesor te va a atender y seguramente tratará de brindarte un buen asesoramiento, pero quizá no era el mejor momento para hacer algo en tu cartera.
A su vez, tu asesor puede darte un consejo que era buena recomendación en el momento en el que hablaron, pero al mes cambia el escenario y si vos no te das cuenta de eso podés quedarte con malas inversiones en tu cartera.
Otro motivo es que si pensás que tu asesor te va a llamar siempre que sea conveniente hacer algo en tu cartera estás muy equivocado. Si no le delegaste la administración de tu cartera y tiene que llamarte ante cada oportunidad que identifique para explicarte el movimiento que está viendo, la realidad es que tiene que elegir a quién le conviene llamar por un tema de su tiempo. Y si tiene de cliente a un fondo con USD 10.000.000 y un cliente con $ 100.000, ¿a quién te pensás que va a llamar?
Por eso es que esa forma intermedia de invertir conduce al fracaso y no la recomendamos. Si estás actualmente manejándote de esa manera, te sugiero que analices optar por alguno de los dos primeros caminos.
Nosotros desde Closing Bell trabajamos con esos dos primeros caminos que sabemos conducen a buen puerto y ayudamos a los inversores que quieran optimizar su dinero.
Al momento de gestionar el día a día de tus inversiones, se puede trabajar de varias maneras y ninguna es mejor que la otra. Lo que sí no sirve es tener dos personas al volante. Aplicar estos consejos te ayudará a tener mayor éxito en tu camino como inversor.