En qué consiste el proyecto crypto lanzado por Sam Altman, CEO de OpenAI
El proyecto está respaldado por la empresa Tools for Humanity, que tiene sedes en San Francisco y Berlín. Durante su período beta, la iniciativa ya ha atraído a 2 millones de usuarios.
Por Gonzalo Andrés Castillo
El lunes fue lanzado oficialmente Worldcoin, un ambicioso proyecto crypto fundado por el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman. La propuesta central de esta crypto es su innovadora característica llamada "World ID" o "Identificación Mundial", la cual pretende servir como un "pasaporte digital" que certifique que su portador es un ser humano real y no un bot de inteligencia artificial.
Para obtener esta codiciada identificación mundial, los clientes deben registrarse para someterse a un escaneo de iris en persona mediante el dispositivo conocido como "orbe" de Worldcoin. El dispositivo, que se asemeja en tamaño a una bola de boliche y tiene un aspecto plateado, verifica la autenticidad de la persona y, una vez confirmada, emite la identificación mundial.
El proyecto está respaldado por la empresa Tools for Humanity, que tiene sedes en San Francisco y Berlín. Durante su período beta, la iniciativa ya ha atraído a 2 millones de usuarios, y, con su lanzamiento, planea expandir las operaciones del "orbe" a 35 ciudades ubicadas en 20 países diferentes. Como incentivo para la adopción, aquellos que se registren en ciertos países recibirán el token WLD de Worldcoin.
El equipo detrás de Worldcoin asegura que las identificaciones mundiales almacenadas en cadenas de bloques preservarán la privacidad de los usuarios y evitarán el control centralizado. Uno de los cofundadores, Alex Blania, comentó que estas identificaciones se vuelven especialmente relevantes en la era de los chatbots generativos de IA, como el famoso ChatGPT, ya que permitirán distinguir entre personas reales y bots en línea.
Sam Altman señaló que Worldcoin no solo busca ofrecer una solución a la proliferación de la IA generativa, sino también explorar formas de abordar las implicaciones económicas que esta tecnología traerá consigo. El empresario ve el potencial del ingreso básico universal (UBI) como un medio para combatir la desigualdad de ingresos que podría surgir debido al reemplazo de trabajos humanos por la inteligencia artificial.