El FMI señala las malas consecuencias de utilizar altas tasas por los bancos centrales
Kristalina Georgieva señaló que la subas de tasas de los bancos centrales podrían desencadenar terribles recesiones en el mundo, política que aun sostiene la Reserva Federal de EEUU.
Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), señaló este viernes sobre el impacto de la agresividad de las políticas monetarias de los principales bancos centrales en países con alta carga de deuda y en la actividad económica de potencias como Estados Unidos, al tiempo que pidió a China continuar con el levantamiento de sus restricciones sanitarias.
La representante del organismo internacional advirtió, en declaraciones a la prensa, que la desaceleración económica de este año será mayor a la anticipada por el Fondo en su último informe de octubre de Perspectivas Económicas Mundiales, en el cual se estimó que tendrá un crecimiento de 2,7% frente al 3,2% del año pasado.
En este sentido, indicó que en el próximo reporte que se publicará a fines de este mes no se espera una gran corrección a la baja.
Uno de los motivos de la disminución en el ritmo de crecimiento, afirmó Georgieva, es la suba de tasas ejercida por los bancos centrales a los fines de bajar la inflación.
Pese a estos vientos en contra, la directora del FMI señaló que los mercados laborales de diversos países, como Estados Unidos, están "mostrando resistencia", lo cual "es un punto positivo".
"Aunque los precios sean altos, mientras la gente esté empleada los consumidores gastan", afirmó en declaraciones difundidas por las agencias AFP y Bloomberg.
Sin embargo, expresó que "el impacto del endurecimiento de las condiciones financieras aún está por llegar, en términos de desempleo". Estas tensiones entre la inflación, los salarios y los desempleos pueden traducirse en "más tensiones entre empleadores y trabajadores" y un peor clima social, señaló. "La inflación sigue siendo terca y, en ese sentido, los bancos centrales no han terminado su trabajo", agregó.
Dentro de los principales objetivos de los bancos centrales se encuentra el cómo maniobrar su política monetaria entre la inflación y la actividad económica. El desenlace ideal sería el llamado "aterrizaje suave": desacelerar la actividad y la demanda para lograr un enfriamiento de la inflación, sin llegar a tal punto de causar una recesión.
Sobre el caso específico de Estados Unidos, dijo que "hay ciertas expectativas de que evite caer en una recesión", y afirmó que "por ahora, la dinámica parece ser más indicativa de un aterrizaje suave". Incluso, si llegara a entrar en una recesión, esta será de carácter "moderado", estimó.
Según la líder del FMI, la recesión mundial "puede evitarse" aún si algunos países sufren desaceleraciones en sus economías.
Asimismo, estimó que, tras superar estas dificultades, el crecimiento en el mundo volverá a cobrar impulso a fines de este año y se acelerará en 2024. Además del impacto en la actividad y en los mercados de trabajo, otra problemática de las subas de tasas es la deuda.
De acuerdo con la jefa del FMI, el incremento de los intereses tendrá un impacto "dramático" en los países con altos niveles de deuda, aunque señaló que el organismo, hasta ahora, no ve una "crisis sistemática de la deuda en el horizonte".