El BCE dispuso una nueva suba de sus tasas de interés
La nueva suba -la octava desde julio del año pasado- fue de 25 puntos porcentuales, en coincidencia con los pronósticos de los economistas, lo cual ubica a las tasas de facilidad de depósito, de refinanciamiento, y de préstamo marginal en 3,5%, 4% y 4,25%, respectivamente, el mayor nivel en más de dos décadas.
Por redacción
El Banco Central Europeo (BCE) dispuso hoy una nueva suba de sus tasas de interés de referencia, al tiempo que anticipó que aún hacen falta más ajustes al alza en el costo del dinero.
La nueva suba -la octava desde julio del año pasado- fue de 25 puntos porcentuales, en coincidencia con los pronósticos de los economistas, lo cual ubica a las tasas de facilidad de depósito, de refinanciamiento, y de préstamo marginal en 3,5%, 4% y 4,25%, respectivamente, el mayor nivel en más de dos décadas.
“La inflación está bajando, pero se proyecta que siga alta por mucho tiempo. El Consejo Gobernante está determinado en asegurar que la inflación regrese a tiempo a su objetivo de mediano plazo del 2% (anual). Por ende, decidió subir las tres tasas de interés de referencia en 25 puntos básicos”, indicó el BCE a través de un comunicado.
Además de subir las tasas, el BCE subió sus proyecciones de inflación y bajó las de crecimiento, proyectando un escenario casi estanflacionario para la economía de la Eurozona.
El organismo ahora espera una inflación promedio del 5,4% anual para este año, 3% para 2024, y de 2,2% en 2025. En los tres casos, las proyecciones superan en una décima las que el BCE comunicó en marzo pasado.
La entidad también revisó al alza las proyecciones del índice núcleo -que excluye los valores volátiles de la energía y los alimentos- a 5,1% para este año, 3% para 2024, y 2,3% para 2025. En tanto, según las nuevas estimaciones, la economía sólo crecerá 0,9% este año, 1,5% en 2024, y 1,6% en 2025.
El BCE, en este caso, bajó en una décima las proyecciones de 2023 y 2024, y mantuvo sin cambios la de 2025.
“Las perspectivas del crecimiento económico y la inflación siguen muy inciertas”, admitió hoy la presidenta del BCE, Christine Lagarde, en declaraciones a la prensa citadas por la agencia Bloomberg.
Entre las causas de la inflación, Lagarde puso el foco en el aumento de los salarios y en los márgenes de las firmas de algunos sectores.
De hecho, la entidad señaló que las tasas efectivas, tanto para empresas (4,4%) como para hipotecas (3,4%), llegaron al “mayor nivel en más de una década” No obstante, anticipó que esta suba de tasas no será la última.
De forma más explícita, la propia Lagarde afirmó, tras ser publicada la decisión, que es “muy posible” un alza en julio. “No estamos pensando sobre pausar (las subas)”, subrayó.
Los analistas aseguran que el de julio será el último ajuste del BCE, teniendo en cuenta que, además de una inflación en moderación, la economía europea se está estancando, habiendo registrado una recesión técnica -la primera desde 2020- en el primer trimestre al contraerse 0,1%.
De todos modos, el escenario sigue abierto y algunos de los “halcones” de la entidad, como el presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, señalaron que el pico de tasas podría no alcanzarse en el próximo verano boreal.
Algo similar ocurre en Estados Unidos donde, si bien la Reserva Federal estadounidense (FED) decidió frenar ayer la suba de tasas, el presidente de la entidad, Jerome Powell, dejó abierto el terreno para otras dos subas de tasas en lo que queda del año, a la espera de nuevos datos de la economía.
El ajuste monetario en la Eurozona no solamente comprende la suba de tasas: el BCE también ratificó hoy que discontinuará en julio las reinversiones de los vencimientos del Programa de Compra de Activos (APP), cuyos montos de reinversiones ya venían bajando en un promedio de 15.000 millones de euros mensuales.