Cuatro pequeños grandes hábitos para aumentar nuestros ahorros
Para mejorar la capacidad de ahorro, vas a tener que recortar gastos innecesarios, aprovechar ofertas, crear un presupuesto e invertir.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Una de las claves para tener una buenas y sanas finanzas personales es contar con una sólida capacidad de ahorro. El problema radica en que muchas personas, a pesar de gozar de buenos ingresos, no pueden disfrutar de esta cualidad. Si este es tu caso, a continuación, un repaso por cuatro pequeños grandes hábitos que hay que dominar para aumentar la cantidad de dinero que guardás mes a mes.
Recortar gastos innecesarios
Lo primero y principal que hay que hacer para aumentar los ahorros es recortar gastos innecesarios, de los cuales se destacan los gastos hormiga y los gastos fantasma.
Los gastos hormiga son todos aquellos consumos "insignificantes" que juntos representan una gran porción de los ingresos, como el café diario de antes de entrar a la oficina. A su vez, los gastos fantasma son los pagos automáticos que se realizan para servicios y bienes que no se utilizan, como alguna cuenta de streaming de la que ni te acordás la contraseña.
En algún momento de tu vida, vas a tener que tomarte un tiempo para analizar tus cuentas bancarias y ver en qué se va tu dinero y con qué frecuencia, detectando esta clase de consumos prescindibles y otros que pueden evitarse para mejorar la capacidad de ahorro. En finanzas personales, menos es mas.
Buscar y aprovechar las ofertas
Otro de los hábitos que tenés que adoptar para ahorrar cada vez más es buscar y aprovechar las ofertas, de todo tipo. No hace falta que seas un exagerado que se suscribe a todos los servicios de cupones y promociones habidos y por haber, pero sí que deberías destinar algunos minutos de tu día a chequear las webs de las principales cadenas de supermercados y otros comercios minoristas y mayoristas.
Cuando ya estés acostumbrado a "cazar" ofertas, vas a notar la enorme cantidad de dinero que prácticamente tiraste a la basura por comprar en cualquier lugar y a cualquier precio por ignorancia, capricho o innecesaria comodidad extra.
Crear un presupuesto
Por otra parte, resulta muy importante que empieces a manejarte con presupuestos. Al tener establecido de forma aproximada y de antemano cuánto tenés que gastar y en qué cosas, sobre todo al hacer las compras semanales o mensuales, vas a reducir las probabilidades de derrochar en bienes innecesarios.
Y en caso de que surja un imprevisto que sobrepase el presupuesto, podrás analizar si te conviene o no salirte del esquema. Normalmente, el tener un presupuesto hace que los consumos extra, generalmente impulsados por el deseo de corto plazo, pasen a segundo plano.
Invertir una parte de los ahorros
Por último, para aumentar tus ahorros en el mediano plazo, es completamente necesario que arranques a invertir. Cómo y en qué cantidad dependerá de tus objetivos, necesidades, tolerancia al riesgo y conocimientos. Pero siempre se tiene que "poner a trabajar" una parte de los ahorros para poder ganarle a la inflación con el paso del tiempo y así llevar una economía personal más saludable.