COVID, el catalizador de cambios en el MECON
Por El enigmático de la Bolsa
Los rumores circulan sobre la salida de Guzmán, y todos se preguntan cuán viables son. La respuesta es simple, muy viables, y algo que se viene hablando hace semanas.
Parece poco creíble una posible renuncia del ministro mientras hace un roadshow en Europa vendiendo los planes de Argentina para renegociaciar con el FMI y el Club de Paris. Pero lo cierto es que desde finales de marzo el comentario de presiones para que Guzmán renuncie, y sea reemplazado por Cecilia Todesca, son un secreto a voces en los pasillos del ministerio, y más luego de la gira de Guzman por Estados Unidos que calificaron como un fracaso, y donde Guzmán le habría planteado la posibilidad a su mentor de hacerse a un lado ante la poca libertad para negociar un buen plan con el FMI. Pero este fin de semana el rumor tomó otro tono y el preámbulo a la renuncia parece haberse acelerado hacia un descenlace mas argumental.
El comentario concreto, hoy, es que Guzmán podría usar la excusa de las restricciones durante la pandemia para dar un paso definitivo al costado, luego de que planteara en todos los órdenes del poder que fiscalmente argentina no puede enfrentar otra cuarentena estricta. Todo indicaría que Argentina, entre finales de abril y la primera semana de mayo, podría encaminarse hacia ese perfil de restricciones y extenderse al menos hasta la primera quincena de junio.
Todo esto afectaría seriamente las metas fiscales con el FMI y todo el plan elaborado de responsabilidad fiscal del ministro, colapsando las estrategias de negociación y creando un serio precedente para 2022. Con una posición de negociador desgastada y sin legitimidad entre los suyos, el ala dura del kirchnerismo buscaría un reemplazo para cambiar un poco el aire en el ministerio.
La pregunta de si es fake o no la renuncia de Guzmán no es la que debemos hacer, sino el cuándo lo hará. Es un hecho que Guzmán se va, el kirchnerismo tiene su reemplazo y Alberto Fernández el propio, todos coinciden en que la mejor interlocutora será Cecilia Todesca, pero el ala más dura kirchnerista desconfía de ella y de la firmeza que tenga para negociar con el FMI. Cristina tiene al reemplazo, y en una reunión lo mencionó. Sólo queda esperar el desenlace.